Pues si, se acabó el exilio. Tras una semana de mudanzas y limpiezas, ya vuelvo a estar en mi a veces aburrido, pero siempre querido Basauri. Parece una tontería, pero tengo la sensación de volver a empezar, y no precisamente donde lo dejé, porque en estos algo más de seis meses las cosas han cambiado, yo he cambiado. La tierra ha seguido girando inexorablemente y yo, siempre empeñado en girar al revés, vengo de vuelta y media dispuesto a comerme el mundo, y, como siempre, es posible que tanta ansia haga que el mundo acabe devorandome a mí.
No se si traigo las ideas más claras, no se si vengo o si voy, no se ya si este es mi último destino o si volverá a ser una mera parada, un apeadero antes de comenzar otro largo viaje, pero se que comienzo el viaje con más ilusión que nunca, con ganas de redescubrir cada rincón y de reencontrar todo aquello que tanto he extrañado.
Les dejo, que el tren va a partir, próxima estación...esperanza.
0 comentarios:
Publicar un comentario